Así se hace un buen cierre de trimestre

Seguramente alguna vez has escuchado esta frase: "Aquellos que no conocen su historia están condenados a repetirla".

Bueno, a veces creo que OKR es como el libro de historia de tu empresa. Con este framework las organizaciones pueden plasmar la narrativa estratégica para inspirar, comprometer y alinear al presente y futuro de la compañia.

Solo piensa en los objetivos viejos que han superado, objetivos nuevos que aspiran, sus resultados, sus experimentos para lograrlos, las hipótesis que validaron, los aprendizajes que adquirieron a lo largo del tiempo. ¿Esa historia esta siendo relatada en algún lado?

Toda empresa debería construir su propio libro de conocimiento colectivo. Esto impulsa una cultura de aprendizaje continuo (qué funciona y qué no) y permite contar la historia de sus esfuerzos, aspiraciones y logros.

Pero hoy quiero entregarte algo más que bonitas reflexiones acerca de por qué creo que todo sistema basado en objetivos y resultados clave es increíble.

Cerrando el Q como Bill Gates

Hay una ceremonia que siempre hacemos a fin de trimestre. Los ya avanzados con la metodología la pueden conocer como "el Cierre de Q" o "Sesiones de Retrospectiva". Hay múltiples maneras de llamarlo, pero también de llevarlo a cabo...

Algunas empresas hacen una sola sesión (larga de 2 o 3 horas mínimo) u otros eligen hacerlo en 2 o 3 reuniones en días consecutivos, solo debes saber que NO puedes hacer una buena sesión con poco tiempo.

Pero ahora, me gustaría resumirte (independientemente del formato que elijas usar) qué cosas debería llevarse tu equipo de esta parte del ciclo de OKR y algunos tips clave para mejorar la dinámica y eficiencia en general de este ritual:

• Evalúa tu propia performance: ¿Hiciste todo lo posible para alcanzar cumplir con tus metas? ¿Hay algo que podrías haber hecho mejor?

No se trata de evaluar solo tu esfuerzo, sino tu eficacia. Son preguntas difíciles, es un momento para hacer una autocrítica, un -¿por qué no?- pedido de ayuda y también ejemplificar un baño de humildad que fortalece la confianza y el espíritu de todo el equipo.

• Define el status de tus objetivos. El progreso no lo es todo. Es importante acordar con tu equipo si un OKR se logro total o parcialmente, si dejo de ser relevante, si se pospuso para otro Q, si quedamos lejos de poder lograrlo... Esto los ayudará a reafirmar sus prioridades estratégicas y a ir pensando en los OKR del siguiente Q:

  • ¿Qué mantenemos?

  • ¿Que dejo de ser prioritario?

  • ¿Cuáles son los nuevos desafíos estratégicos?

  
  

• Documenten los aprendizajes: ¿Qué funcionó y qué no? Expliquen las razones. También puede ser provechoso preguntarse: ¿Qué los motivó y que los desmotivó durante el Q?. Esto puede abrir muchas conversaciones importantes pero sobre todo necesarias entre el equipo directivo.

Sin importar si los objetivos se alcanzaron o no, siempre habrá cosas que aprender y no quieres que eso se escape del radar.

• ¡Definan sus próximos pasos! - Hasta ahora tu equipo hizo un gran análisis de todo lo que sucedió, es momento de plasmar ese aprendizaje y pensar de cara al próximo trimestre. Puedes pensar en tus propias preguntas disparadoras, pero a nosotros nos gusta mucho usar: Si tuvieras que elegir una sola prioridad para el próximo trimestre, ¿Cuál sería?.

¿Qué mas puedes hacer para mejorar esto?

Para ejecutar un buen cierre de trimestre necesitas algunas habilidades blandas para que el resto de tu equipo tenga una apertura con sinceridad, autocrítica y emita energía para encarar el próximo trimestre.

Pero si tu equipo es distribuido o semi-distribuido también puedes apoyarte de plantillas, software, tecnología... esto facilitará mucho más la dinámica.

Si te interesa comenzar a aplicar esto en tu organización o quieren optimizar sus procesos actuales, podemos hacer una sesión flash para que lleguen al Q3 con una estrategia bien planteada, sus equipos alineados y mucho más foco.

Agenda aquí y te cuento más.